18 de julio: La derecha victoriosa
Como cuenta Iñaki Egaña en un artículo suyo, en 1936, la derecha golpista, la del mensaje previo zafio, agresivo e insultante era la dueña de los bancos y entidades financieras, de la mayoría en las cantinas de los cuarteles, de los púlpitos, propietaria del suelo y del campo. La derecha perdió las elecciones y decidió que para gobernar no debía guardar las formas. Se aburrió del sistema democrático.
Los cuarteles fueron los focos de la sublevación y si no hubo unanimidad, las balas acallaron a los tibios. El 18 de julio de 1936, día del golpe en la Península, salieron a la luz todos los fantasmas que la derecha guardaba en la trastienda.
“Que quede esto bien claro: Bilbao conquistado por las armas. Nada de pactos y agradecimiento póstumos. Ley de guerra dura, viril inexorable. Ha habido, ¡vaya que sí ha habido!, vencedores y vencidos. Ha triunfado la España una grande y libre; es decir la España de la Falange Tradicionalista. Ha caído vencida aniquilada para siempre, esa horrible pesadilla siniestra y atroz que se llamaba Euzkadi y que era una resultante del socialismo prietista, de un lado, y de la imbecilidad vizcaitarra por otro”.
La derecha que se sublevó el 18 de julio de 1936, la que triunfó en la guerra, la que llenó cárceles y cunetas de disidentes, sigue, 70 años después, tan intacta como siempre. Con ganas de repetir sus hazañas. Con los cuchillos afilados. Hasta los aparentemente más evolucionados a veces ven como les traicionan las palabras, como es el caso de Josep Piqué, quien recientemente ha dicho que el franquismo fue "un autoritarismo de derechas" y no "un régimen fascista". A veces, algunos de la “derecha de éste estado” producen mas terror con sus palabras, hechos y/o deseos manifestados que otros “ manifiestos terroristas” de libro.
Etiquetas: Política